Grabado, mezclado y masterizado por P R O S A
Tomas en El Estudio, Crearte y Cuenco
2000-2006
Músicos
Voz, teclados, guitarra acústica: Prosa
Batería: Mape Bossio
Bajo: Alexis Bondiuk
Guitarra eléctrica y clásica: Federico Navarro
Percusión: Ramiro Silva y Pablo Fernández
Cuántos millones de años hace que,
algunos dicen, ella está aquí...
Mucho antes que alguien la pudiera ver
y el dinosaurio aprendiera a vivir
se encontró dando vueltas sin querer
en torno a un amo estático y febril.
Mojada estaba aún su tibia piel
sin horizontes más que un mar hostil.
Y asomó su nariz
y miró al cenit.
Y fue la tarde y la mañana de su primer día.
Su primer día
Su primer día
Hipnotizada en extraño ritual
su corazón hervía aún después
de haber dejado el útero espacial
que alguna estrella agonizante fue.
Que no estaba sola pronto descubrió,
sus ocho hermanos nacían también.
Desde Mercurio al frío de Plutón
toda la vida se llevaron bien.
Y vivió como los demás
sin pensar que era especial.
Con sus volcanes y tempestades en su segundo día.
Puede ser que tal vez tus hijos
tengan la suerte de tener hijos
que tengan hijos que tengan suerte
de tener mundo para sus hijos.
Y puede ser que también sus hijos
tengan la suerte de tener hijos
que tengan hijos que tengan suerte
de tener mundo…
Como en tela un eximio pintor
sobre su lomo toda dibujó.
En tinta verde hundió su gran pincel
y el mundo vegetal hizo nacer.
Su primavera tuvo entonces flor
Y el tercer día pronto terminó.
El cuarto día al salir el sol
un nuevo ser viviente despertó.
Sus ojos lento abrió
sin pensar, sin razón.
Y en los millones de años que duró el quinto día
De la bacteria a los saurios cobraron vida.
Pronto nacerá en vos algo inteligente
que tendrá algo de Dios y algo de delincuente.
Esa especie superior dañará tu vientre,
tu escudo y sin razón, cambiará tu suerte.
Suerte
Suerte
Me nubla la razón
la fría inmensidad
de una jungla de plástico y metal.
Extraña sensación
entre tantos andar
y al final siempre estar en soledad.
La civilización,
el reino del reloj,
minuto a minuto matándonos.
Se vende dignidad
se compra una amistad,
dónde se nos quedan la humanidad…
Quiero mirar al cielo y bailar
en la noche el silencio me quiere hablar.
Quiero contar estrellas y escapar
de la cárcel del tiempo y volver allá
cuando estabas más cerca, libertad,
del alma de los pueblos sin ciudad.
Rompe el cemento gris
buscando ver su sol
un planeta que se niega a morir.
Soy víctima fatal
del mundo artificial
pagando con la vida el bienestar.
Me pierdo una vez más
en tanta oscuridad
entre miles de luces sin final…
Entre nubes de gas,
rutina y ansiedad
dónde se nos quedó la humanidad.
Quiero mirar al cielo y bailar
en la noche el silencio me quiere hablar.
Quiero contar estrellas y escapar
de la cárcel del tiempo y volver allá
cuando estabas más cerca, libertad,
del alma de los pueblos sin ciudad.
Pueblos sin ciudad
Pueblos sin cuidad
La tierra del mar y del sol
no tenía fronteras.
A caña, canela y sudor
olía su piel morena.
Mi niña un día despertó
de su sueño profundo,
cuando extraña gente llegó
desde un lejano mundo.
Saquearon tu oro y después
repartieron sus tierras
y en nombre de un cristo y un rey
izaron sus banderas.
La espada los cuerpos abrió
de miles de inocentes,
porque en sus mentes no entró
un mundo diferente.
Mi niña su vida entregó
en manos de extranjeros
y poquito a poco olvidó
sus dueños verdaderos.
Suda Sudamérica.
Sudamérica
tu voz se quebró en tu soledad
perdiendo tu hermosa libertad.
La tierra del mar y del sol
no tenía fronteras.
Hoy todo es poder y ambición
en mi Sudamérica.
Tiranos que sacian su sed
con sangre de los pueblos,
políticos que hablan muy bien
siempre los mismos cuentos.
Sudamérica
tu voz se quebró en tu soledad
perdiendo tu hermosa libertad.
Sudamérica
llorando vas tu virginidad
desde hace quinientos años ya.
Sudamérica
Sudamérica
Poco a poco vende su alma
quien ha vendido su cuerpo.
Poco a poco el que acecha en la trampa
caerá en su propio juego.
Poco a poco cae en el olvido
quien ha empeñado su nombre
y lo que el tramposo ha escondido
se gritará en las cortes.
Como las olas de un mar tenaz
gastando van
la dura roca que perderá
al fin su lugar.
Poco a poco pierde su estrella
quien vuela bajo la tormenta
y el que la injusticia alimenta
pagará su justa cuenta.
Nadie es tan perfecto en sí mismo.
Nadie es nada, nadie es todo.
Quién se acusa libre de vicios
para señalar a otro?
Como las olas de un mar tenaz
gastando van
la dura roca que perderá
al fin su lugar.
Poco apoco con mi amor tendré
tu corazón.
Poco a poco te enamoraré,
poco a poco.
La roca se vuelve arena
de tanto que el agua golpea.
Poco a poco
Poco a poco
Se acostó ayer temprano, antes que su mujer.
Ella sabe que está cansado
de nuevo, como para querer.
Se levanta y se ducha, desayuna un café,
casi olvida que hoy tiene junta
de negocios, de ocho a diez.
Mientras conduce consulta a la vez
el libro que le produjo el estrés
su agenda dicta lo que debe hacer
desde que despierta hasta el anochecer.
Hombre de bien
olvidó sus sueños de ayer
para tener a su nombre un Mercedes Benz.
Hombre de bien
Se ha olvidado de su mujer
por un bufet y un fácil amor de motel.
Hace solo unos cuantos años se creía Gardel,
Luther King, Cousteau y Mandela
y John Lennon y el Che
y cayó en la rutina y al final sin querer
se pasó toda la vida
en su oficina entre humo y papel.
Cruza una roja mirando el reloj
le está esperando el señor director
de no llegar habrá otro en su sillón
en la cadena es solo un eslabón.
Hombre de bien
a nadie le importa quién es
quién quiso ser, ni cuánto tuvo que perder.
Hombre de bien
mientras haga lo que hay que hacer,
no importa qué, mientras el sistema esté en pie.
Hombre de bien
Hombre de bien
Va tocando la vida con las manos.
Nunca vio su color.
A su lado un compañero frío y blanco
escoltando su dolor.
La gente no para, pasa de largo,
nadie escucha su voz.
En estos tiempos nadie cree en los milagros
una limosna es una buena solución.
Su bandoneón llora un tango
Y van goteando monedas
como si ahuyentar pudieran
su oscuridad.
Un poco de luz quisiera
para sus mañanas,
solo un poquito de luz le alcanza.
Si pudiera ver brillar el sol…
Gastando la vida en todos lados,
no hay nada nuevo bajo el sol.
Va rodeado de amistades y empleados
incondicionales, mientras pague su favor.
Tiene tantas cuentas en tantos bancos
todo está bajo su control
y está pensando proclamarse candidato
en la próxima elección.
Todo puede no ser nada
si el domingo por la mañana
a nadie le importa si sangra
su soledad.
Un poco de luz quisiera
para sus mañanas,
solo un poquito de luz le alcanza.
Si alguien lo quisiera de verdad…
Son dos tipos tan distintos
y los dos piden solo un poquito de luz.
Un poquito de luz
Un poquito de luz
En tu corazón de carne y sal
guardas una flor y un puñal.
Perfumes de amor, filo mortal
para herir a quien te quiera amar.
En tu corazón de sangre y cal,
montaña de hielo y volcán
encuentro la paz y pierdo la razón.
Solo dime qué puedo esperar.
Ay, qué puedo hacer para que este amor
me deje respirar.
Ay, qué puedo hacer si mi corazón
no te quiere olvidar.
En tu corazón de arena y mar,
dulce calma y cruel tempestad,
paraíso de amor, trampa infernal,
naufraga quien te quiera conquistar.
Me duele estar lejos de ti,
pero esto me mata.
Cómo puedes darme de tu miel
y desaparecer.
Cuánto piensas que tu hechizo
va a tenerme preso en tu piel
esperando a que quieras querer.
En tu corazón
En tu corazón
Ay, si pudiera
derramar en pocas letras,
como escriben los poetas, este amor.
Cómo quisiera
devolverte en primaveras
cada invierno que tu pecho me abrigó.
Ay, si supiera
dónde se esconden esos besos
que en la boca tuve presos
y que nunca te di.
Ay, si volviera
a verte bajo aquella luna
ya no rondarían dudas en mi voz.
Por esos ojos,
y para el resto de mi vida, juro
que te llevaré prendida al corazón.
Ay, si supiera
por qué cobardemente espero
para decir cómo te quiero
casi cuando te perdí.
Cuánto le rogué
a Dios para tenerte aquí otra vez…
Cómo iba a respirar si tu amor
es la puerta que oxigena cada poro,
cada parte de mi ser.
Inseparable parte de mi ser.
Ay, si volviera atrás sería igual
te amaría con locura y curaría tus heridas.
Dónde se esconden esos besos
Dónde se escond
Mi cielo todavía llueve,
no hagas que sea eterna mi noche.
Ayúdame a espantar la muerte
que quedan horizontes por amanecer...
Las pisadas asesinas suenan implacables.
Tan seguras de sí mismas y, a la vez, cobardes.
Siempre está la duda.
Mi enemigo es fruto vivo de mi propia vida.
Le di a beber mis ríos y mi sabiduría,
que ahora es su cultura.
Se hizo dios, verdugo y dictador de su locura
y quebró mi fragilidad
y quebró mi frágil estructura.
No me abandones, sálvame
que se hace la noche y no despertaré
si no despiertas de este sueño.
Viviré solo si curas tu herida
la medicina está dormida bajo tu piel
y se me está acabando el tiempo.
Mis bosques y selvas han caído destruidos
bajo el hacha negra de intereses y egoísmos.
No sé cómo respiro.
Punzantes arpones implacables, imparables
hacen blanco pintando de muerte mis mares.
Imperios sin principios que hipotecan el futuro
por poder… desaparecer.
Probablemente un día despierte
con algo de paz, con algo de luz.
Tal vez al final ocurra el milagro
que cambies tu mente y te vuelvas humano.
No me abandones, sálvame
que se hace la noche y no despertaré
si no despiertas de este sueño.
Viviré solo si curas tu herida
la medicina está dormida bajo tu piel
y se me está acabando el tiempo.
No me abandones
No me abandones
Hay veces que tengo cerrada la puerta
la puerta de arriba que me lleva a vos
y aunque abro mis ojos, esa luz no entra.
La luz que ilumina el mundo interior.
Yo sé que puedo salir porque estás conmigo
dándome la fe
como un ángel protector
alumbrando el camino.
Entre tanta corrupción
locura y desolación
no puedo dejarme caer.
Dame la fuerza de cumplir las promesas
dame el valor de soportar el dolor.
Quiero en mi alma un poco de tu esperanza
quiero luchar por la paz.
Mis ojos no ven detrás de las paredes.
Mis oídos no escuchan clara tu voz.
Sería tan bueno verte frente a frente
y sentir tu mano calmando el dolor…
No quiero el dinero del estafador
no quiero la caricia de la mano hipócrita
no quiero los halagos de la falsedad
ni el consejo de la insensatez.
No quiero compartir la mesa con el opresor
ni con los que lavan sus culpas con la caridad.
No voy a comulgar con una religión
que ofrece salvación a cambio de poder
mercaderes de la fe.
Entre tanta corrupción
mentira y desolación
no puedo dejarme caer.
Dame la fuerza de cumplir las promesas
dame el valor de soportar el dolor.
Quiero en mi alma un poco de tu esperanza
quiero luchar por la paz.
Porque estás conmigo
Porque estás conm
A mi viejito
Cuando hablemos lo necesario
cuando oigamos lo suficiente
cuando la fuerza sea impotente
para mandar el corazón humano.
Cuando el sol brille para siempre,
el sol de la justicia que tanto buscamos…
Todavía quiero creer que un día te abrazaré.
No creas que no lo sé,
sé que es difícil pero no es imposible
juntos lo vamos a hacer.
Cuando aprendamos a respetarnos
y no enseñemos la intolerancia,
cuando las leyes no miren razas
y en el mundo vivan seres humanos.
El día que el cielo sea nuestro techo
y casa de todos el Universo.
Todavía quiero creer...
Que cuando ayudemos, no recordemos
y si recibimos, no lo olvidemos.
Así algunos ricos ya no serán pobres
y todos los pobres dejarán de serlo.
Que cuando caigamos nos levantemos
como entre hermanos, un solo pueblo.
Cuando solo hablemos lo que sea necesario
y oigamos un poquito al que tenemos al lado,
cuando aprendamos al final a respetarnos
Y en el mundo seamos todos,
sobre todo, más humanos.
Cuando ayudemos, no recordemos.
Si recibimos, no lo olvidemos.
Que si nos caemos juntos nos levantaremos
de la mano, como hermanos, al final un solo pueblo.
Todavía quiero creer que un día te abrazaré.
No creas que no lo sé,
sé que es difícil pero no es imposible
juntos lo vamos a hacer.
Todavía quiero creer
Todavía quiero cr